El valor total de un activo o negocio a menudo se llama su valor intrínseco. Este se basa más en los fundamentos del negocio que en cómo el mercado valora el activo. Comprender el valor intrínseco es útil para determinar si una acción está sobrevalorada, subvalorada o correctamente valorada. Esta evaluación se basa en su desempeño financiero y potencial futuro.
Por qué importa el valor intrínseco
El precio de mercado de una acción usualmente refleja la oferta y la demanda, pero el valor intrínseco considera todo, desde la viabilidad financiera hasta el modelo de negocio y el crecimiento de la empresa. Permite a los inversores tomar decisiones más informadas que se basan en la longevidad en lugar de en las perturbaciones a corto plazo del mercado.
Algunos indicadores fundamentales utilizados para medir el valor intrínseco incluyen planes y valores de negocio, liderazgo, audiencias objetivo, patrones de la industria, proyecciones de flujo de efectivo y ratios financieros.
Cálculo del valor intrínseco
El valor intrínseco no se limita a los enfoques de un solo método. Los inversores son libres de usar una distintos modelos, cada uno con una gama de beneficios. Los tres enfoques más comunes son el modelo de flujo de caja descontado, el modelo de ingreso residual y el modelo de descuento de dividendos.
El modelo de flujo de caja descontado (DCF, por sus siglas en inglés)
El modelo de flujo de caja descontado estima el valor inmediato de los flujos de caja futuros anticipados de una empresa. El método puede funcionar para empresas con ganancias predecibles y flujos de caja más estables. Los componentes clave incluyen:
Flujos de caja futuros estimados (CF).
Tasa de descuento (r), generalmente se basa en el costo de capital de la empresa.
Valor terminal (TV), que estima el valor de la empresa al final del periodo proyectado